viernes, 20 de noviembre de 2009

ESPERANDO LA NAVIDAD


Nuestras calles comienzan a cambiar, todo se llena de bonitas luces, escaparates de lujo nos sonríen al pasar y la "felicidad" parece que quisiera atraparnos con un gran lazo de papel charol. Se acercan las fiestas, por cierto, cada año que pasa el bombardeo comienza antes, y los anuncios empiezan a oler mejor, las mujeres son más perfectas y seductoras y los hombres más varoniles; cómo no.
De entre todos los anuncios; un clásico en mi vida: los turrones....pero a mí me traen otros recuerdos, otras sensaciones...
De entre toda la felicidad que nos intentan vender, las fiestas, las comilonas y reuniones familiares, ¿se pararon a pensar-entre otras cosas-en las familias que quedaron incompletas por algún motivo?.
Oigo el dichoso anuncio del turrón mientras mis ojos se van anegando en salado líquido amargo, pues nunca más volveré a percibir su sonrisa en "mi vuelta al hogar", nunca más sus palabras de consuelo llenarán mis oídos, ni sus sabios consejos serán reprochados por la inexperiencia de los años.
Amanecerá el fatídico día; día de carreras por las últimas compras, colas en comercios abarrotados de gente con cara desencajada, tardes de cocina al abrigo de exquisitos olores, peluquería de última hora y maquillaje especial, regalos bien escondidos y nervios de última hora; y mientras tanto, en la última punta del universo; una mano, que cansada,se deja llevar hasta la laxitud, los ojos semicerrados,hartos de sufrimiento, y un último suspiro que te aleja de mi vida.
La noche se presenta vestida de fiesta, los mejores sentimientos nos abrigan al ritmo de dulces canciones tarareadas año tras año acompañadas de rústicos instrumentos,y yo me alimento de las últimas horas que pasaré en tu presencia mientras un tierno "Noche de paz" se oye. Por éso cuando otro año, otra Navidad se acerca, los recuerdos y las vivencias, ésas que nunca marcharon, me ahogan en sufrimiento eterno; revivo una y otra vez tu dulzura de pálida máscara, tu frágil cuerpo de vida abandonado entre blancas sábanas, y mi amor flotando, perdido, sin encontrar el rostro que me dió la vida, no sabiendo donde anidar.
Por eso te recuerdo, te añoro hoy aquí, hoy y todos los hoy que forman y formarán mi vida, porque tu presencia-aún sin tenerte-siempre permanece, va conmigo, hasta el final de mis días
Te quiero,m.

14 comentarios:

D´Paula dijo...

Si te sirve de algo y ya te lo he dicho durante muchos años, sigo insistiendo que morir el día de nochebuena es todo una bendición. Ella, cada año, nos acompaña en esa noche tan dulce, sabes que notamos su presencia.
Un beso. Te queremos.

JORGE dijo...

Yo, que no me siento autorizado para hablar de ello,debo decirte si te sirve de consuelo, que tuve la ocasión de verla quizá un par de veces; pero de sentirla siempre cuando tú la has tenido en tus labios. De forma inmejorable.
Creo que el mejor homenaje que puedes hacerle es transmitir a los tuyos lo que, en ese día, ella siempre quiso transmitirte a tí. Y a fe que lo consiguió.
Mi mejor deseo te envio para que seas feliz y hagas feliz (que me consta) a los tuyos. Seguro que con eso, habrá alguna estrella que brille más que ninguna otra en el firmamento.
La luz que transmite, infinita, cada vez que la nombras a tus ojos.

marimer dijo...

Querido Jorge, tú y siempre tú tendrás autorización para pensar y hablar de ella, porque la conociste,nos conoces y lo que es más importante, nos sientes.
¿Estrella que brilla más en el cielo?, pues sí, así lo pienso cuando su negrura me atrapa y me quedo embobada mirando.Desde luego, y al menos, en mis ojos brilla pues cada día que pasa noto más su ausencia.
Un gran beso

marimer dijo...

D´Paula, no sé, no sé de que marchar en día tan señalado sea una bendición,también hace que la Navidad ya no sea la misma, porque es día de reuniones, de encuentros, y tú sabes....
De todas formas, se intenta que se note lo menos posible, por respeto al resto de la gente.
Más si ellos supieran!!...
Un beso

Anatorres dijo...

Siente hoy más que nunca,
mi abrazo apretado,
amiga.

marimer dijo...

Hola querida,...y también hoy es el cumple de mi padre, que aún aquí vuela libre disfrutando de su vida, su nueva vida.
!qué triste!!!!!
En fin, los besos para las buenas amigas como tú

Anónimo dijo...

Querida Marimer: no te conozco, pero también por estos lares se conoce un poco a la gente y se aprende a estimarla . Por éso, mis mejores deseos para tí dciendote que el recuerdo también consuela, aunque duela ( tengo experiencia en sentir ausencias en Navidad), y éste año, con más motivo quisiera que el tiempo diera un salto dejando atrás ésa fiesta tan entrañable, ya que para mi familia , estos días también ha nacido una nueva estrella en el cielo, que seguro que, como la tuya, estará ahí para ayudarnos a seguir, como tú dices, por los que tenemos alrededor. Un beso y todo mi apoyo, Marimer. c .

JORGE dijo...

Ahora, Marimer, sí que me siento autorizado a pensar en cuanto dices. Hace tres días se nos fué una estrella en la familia, una estrella callada, silenciosa, todo bondad y todo ternura. La madre que nunca tuvo pero que siempre fué, la abuela que mis hijos han tenido sin nunca serlo, mi segunda madre que siempre ha sido y será. Ya no podrá saludar a mi peque cuando entre por la puerta corriendo a abrazarla (incluso alguna vez llegó a tirarla al suelo del ímpetu con que lo hacía)ya no podrá alabar la enorme talla y fuerza de mi hijo mayor al que no alcanzaba a besar por su estatura y solo tiene 15 años, ya no podremos quejarnos en nochevieja de que tome dulces porque perjudican su azúcar, no podré sentir su abrazo infinito y cariñoso, su voz cálida siempre dando consejos, siempre en la sombra, siempre queriendo con un corazón que no le cabía en el pecho... No podré acostumbrarme a pasar por esa calle y no verla asomada a la puerta o esperándonos con los brazo abiertos.. no podré volver a llevarle los domingos esos churros recién hechos que tanto le gustaban... a llevarle la compra del súper por la que casi me pedía perdón porque perdiese el tiempo en ello.. ( y ahora sé que ese tiempo fue el mejor empleado de mi vida) a que nos acompañara en las noches de otoño junto a su mesilla, hablando, charlando, siempre llena de candor, de ternura, siempre dándolo todo, siempre mostrando su mejor sonrisa, su mejor aliento para nosotros.

Se nos ha ido.

Nos ha dejado huérfanos hasta de lágrimas, pues ya no nos quedan...

Ahora no alcanzo a medir el vacío, no tengo la luz que nos daba... ahora sí que, como le decía a D´paula en un comentario último, estamos solos con el mar...

Su despedida ha sido capaz de juntar en abrazos algunas viejas rencillas, ha dejado una soledad esteparia que sólo, únicamente, podremos llenar mirando al cielo como te digo y haciendo nuestra la luz de la estrella que más brille, pues a buen seguro será ella, ya que no ha tenido más compañera en su última viaje que la luz que llevó siempre en su mirada; el resto; el resto de recuerdos, nos los ha dejado aquí para siempre.

Ella, como dice mi peque, seguirá jugando con nosotros a las cartas y poniéndoles la "tapilla" y la coca- cola que tanto les gustaba desde el cielo.

Siempre estarás con nosotros; siempre te tendremos, porque aunque te hayas ido no te hemos perdido...

Howard Eff dijo...

Me has tocado las fimbrias y emocionado profundamente,creo honradamente que tú (si me permites que te tutee)si que has comprendido el tan traído y llevado "espíritu de la Navidad". Feliz Navidad de verdad.

marimer dijo...

Gracias anónimo c. por tus palabras, tu apoyo y tu consuelo; como bien dices este trago nos toca a quien nos toca y nada ni nadie es capaz de aliviarlo; si acaso, el sentirlo/a cerca, con nosotros,y hablarle y contarle como si estuviera aquí.
Las fiestas; no te digo nada, ¿para qué?, unida a los que se fueron y un brindis con mucho amor.
Un beso; te espero por aquí

marimer dijo...

Querido Jorge,siento mucho por donde habéis pasado pero es ley de vida, no se puede remediar.
Ahora os queda la bonita misión de que no se olvide, que siga viva en vuestras vidas, que forme parte de las vivencias de tus hijos y de su pasado, presente y futuro.
Que no se pierda, ni olvide que sois lo que sois, y sentís lo que sentís; por ella, por su cariño, su comprensión y su amor.
Y en las fiestas que se nos avecinan; todos juntos para recordarla y agradecerle todos los años pasados a su lado.
Un beso compartido y mucha fuerza para seguir adelante.

marimer dijo...

Gracias Howard Eff por tus agradecidas palabras y sí, me puedes tutear; no soy ni más ni menos que nadie.
Quizás desnudé mi alma con demasiadas ganas, pero se lo debía, era una asignatura pendiente en mi corazón guardada durante demasiados años y tenía que llegar éste día.
La fecha de su aniversario es muy dolorosa para mí; son dos días demasiado señalados como para olvidarlos, pero tengo hijas y me veo en la obligación, el placer y el deseo de seguir adelante, con ellas y por ellas; porque así lo hubiese querido si estuviese aquí.
De todas formas, siempre te preguntas ¿qué hubiese sido de mi vida si ella no se hubiese ido?, ¿cuántas cosas hubiesen cambiado?...pero ya no existe respuesta.
Aprendí con los años a disfrutar la Navidad de otra forma, a intercalar los momentos dolorosos con otros festivos, pero siempre intento estar todos juntos, aunque sea comiendo nuestro típico y delicioso "hoyo".
Y por supuesto, siempre me acuerdo de los que en éstos días sufren, por un motivo u otro.
Un beso, y nuevamente gracias por tu visita.

Howard Eff dijo...

Me has vuelto a emocionar. Tus palabras escritas rezuman sinceridad,agradecimiento, nostalgia,cariño, mucho amor y paz. El nació en ese día para que nosotros pudieramos nacer a la vida, porque la muerte no es el final sino el principio. Gracias por tus reflexiones, gracias por compartir tus intimidades. Ella desde el cielo estará muy orgullosa de ti. Saludos cordiales.

marimer dijo...

Hola Howard, creo que me sobrevaloras porque cualquiera que exponga sus sentimientos con estos temas pensaría igual que yo, solo que quizás no tengan el mecanismo para hacerlo.
Me gustaría pensar que es cierto que se siente orgullosa de mí; de nosotras. Espero que así sea de todo corazón.
Un saludo